Alternativa gas natural
Piso con caldera de gas alternativa
El gas es una de las principales fuentes de energía en el hogar, principalmente para calentar la casa en invierno. Pero no es la única solución de calefacción, ya que hay otras más económicas y respetuosas con el medio ambiente. No es fácil orientarse entre todas las opciones, así que en este artículo se explica todo antes de tomar la decisión final.
Por ejemplo, a medida que el recurso se hace más escaso, el precio aumentará. Así que el gas natural no es una solución para el futuro. Hay que buscar nuevas alternativas, tanto para la estabilidad del clima como para el bolsillo.
Hay otras alternativas al gas en el hogar, entre ellas las energías renovables, que siempre están disponibles: como su nombre indica, sus reservas no son limitadas y pueden utilizarse mientras las necesitemos.
También es posible instalar calefactores eléctricos de zócalo: no son móviles y transportables como otros tipos de calefactores, pero son ideales para calentar grandes espacios.
Metano del gas de la ciudad
Aumentar la capacidad de importación de gas natural licuado, especialmente desde Estados Unidos, y reforzar las interconexiones de gas y electricidad en los Balcanes, el Mar del Norte, Italia y, eventualmente, el Norte de África, son algunas de las opciones que los países de la UE barajan actualmente para diversificar el suministro energético de Rusia.
España es la menos afectada por un posible embargo energético a Rusia, ya que importa menos del 10% de su gas de ese país. La mayor parte de su gas procede de Argelia, mientras que el carbón se importa principalmente de Colombia e Indonesia.
Francia no depende de los recursos rusos: entre el 20 y el 30% de su gas y el 10-20% de su petróleo se importan de Rusia. El Primer Ministro Jean Castex destacó la necesidad de aumentar la capacidad de importación de GNL y el desarrollo de las energías renovables.
El gobierno eslovaco depende de las importaciones de GNL de la terminal de Krk (Croacia), cuyo gas se espera que proceda de Estados Unidos. El país cuenta con una capacidad de almacenamiento de gas relativamente grande y el gobierno tiene previsto llenarla antes del próximo invierno.
Composición del gas de la ciudad
Además, las consecuencias de la explotación de los gases fósiles no se limitan al clima: considerables daños medioambientales, destrucción de la biodiversidad, violaciones de los derechos humanos, desplazamiento de poblaciones y conflictos geopolíticos.
Nuestras campañas se guían únicamente por estos objetivos: luchar contra las causas del cambio climático que amenazan nuestro futuro en la Tierra y frenar la pérdida de biodiversidad. Por ello, dejar los combustibles fósiles, y por tanto el gas fósil, es una prioridad para nosotros.
Sustituir la caldera de gas
Como explica la consultora Carbone 4 en su informe sobre el gas natural licuado, "no todas las añadas son iguales". Y mientras Joe Biden anunció el pasado mes de marzo una asociación energética de 15.000 millones de m3 de GNL garantizados para el mercado europeo en 2022, el GNL estadounidense es objeto de fuertes críticas. De hecho, "cerca del 79% de la producción total de gas natural seco de Estados Unidos" procede del gas de esquisto, según la Administración de Energía de Estados Unidos. Sin embargo, esta técnica de extracción por fracturación hidráulica tiene una serie de consecuencias negativas: contaminación del agua, terremotos y emisiones de metano. En Francia, una moratoria prohíbe la exploración y producción de gas de esquisto desde 2011.
Sin embargo, la tensión por el GNL es tal que países como Pakistán y Bangladesh, que no disponen de los recursos de los europeos para abastecerse de gas para su consumo eléctrico, están sufriendo cortes de electricidad que paralizan sus economías y provocan disturbios.